Piercings genitales: Todo sobre ellos.

Los piercing genitales son muy solicitados en comparación a los demás, quizá porque no tienen la aceptación social de otros tipos de piercing o  porque desconocemos el grado de dolor que puede provocarnos a la hora de hacérnoslo (además de tener unos posteriores cuidados minuciosos). 

Hoy vamos a hablar de los piercing genitales femeninos, que van desde el surface más común llamado Christina que está entre el monte de venus y el principio de los labios vaginales hasta el que puede ser el menos conocido y menos visto; el piercing fourchette o piercing vertical del perineo (también tiene este su versión masculina)

- Piercing Christina: como hemos mencionado antes se encuentra en el monte de venus atravesando hasta el principio de los labios y carece de estimulación sexual al no tener contacto directo con la vagina, pero en cuanto a estética es uno de los más bonitos y demandados. El nombre de este piercing se debe a la primera persona que lo tuvo. También es conocido con el nombre Venus en referencia a su localización. En cuanto a  su cicatrización, es larga, de 9 a 18 meses, pero esto no significa que en este periodo el piercing te duela o esté infectado. Además no impide tener relaciones sexuales pero si tener un especial cuidado  y mantenerlo siempre limpio a la medida de lo posible.

- Piercing Hood o capuchón del clítoris: se encuentra en el recoveco cutáneo que recubre el clítoris, es decir NO se atraviesa por ningún concepto el clítoris. Se atraviesa horizontalmente o verticalmente por una banana encorvada o por un barbel recto. En su versión vertical, el piercing se realiza de manera  que apoye directamente sobre el clítoris. En cuanto a si provoca placer o no, esto depende de la persona por supuesto, es como todo, aunque si que es verdad que al estar rozando casi la zona es más fácil el roce y una estimulación. Pero sin crear falsos mitos, por favor. Este piercing es el que se practica en lugar de el piercing del clítoris (NADA RECOMENDADO) porque permite estimular el clítoris sin riesgo de insensibilizarlo y en cuanto su cicatrización, es menos larga que el piercing anterior, sobre unos 2 meses porque está en una zona muy vascularizada lo que proporciona una curación idónea.

- Piercing en los labios mayores y menores: es uno de los piercing más sencillos y consiste en atravesar el labio y colocar la joya (a menudo un aro) el cual muchas veces se realiza simétrico por fetichismo, porque en la antigüedad se usaba para colocarle a las mujeres dos perforaciones ahí y un candado prohibiendo así la entrada en la vagina. Este piercing está en una zona también muy vascularizada por la que su cicatrización es de unos 2 a 3 meses con unos cuidados adecuados. No tiene ningún riesgo solo que hay que tener cuidado por si nos lo enganchamos.

Por último vamos a hablar de uno de los piercing genitales menos conocidos, el piercing vertical del perineo o fourchette. La mayoría de las mujeres no tiene una anatomía adecuada para realizar esta perforación, se necesita un pliegue de tejido apropiado en la parte posterior de la vagina, donde se ubica el piercing. La cicatrización depende de la persona pero es mucho más larga por ser una zona delicada, puede variar de los 4 meses a los 18. Quizá no sea el piercing más cómodo de llevar, pero lo dicho anteriormente todo depende de la anatomía de la persona. 

Realmente, es un poco mito que todos los piercing genitales vayan a producir excitación o tanta como se dice, la excitación que puedan causar o no depende mucho de la persona, su anatomía o el roce que pueda hacer la joya. Pero quizá sea el simple hecho de llevar un piercing ahí que hace que te sientas como con más "erotismo"

Os aconsejamos que no tengáis tabúes ante estos piercing, siempre y cuando tengáis la higiene y cuidado adecuados no darán más problemas que los piercing típicos.